CAMBIA TU VIDA Y TRABAJO: La experiencia de Vivir y trabajar en Malta
Un viaje de mil millas comienza con un primer paso.
Lao Tzu
Mudarse a una nueva ciudad y cambiar de vida puede percibirse como una experiencia completamente nueva y emocionante: el entusiasmo por lo novedoso, la sensación de renacer, el coraje de asumir riesgos para embarcarse en un nuevo proyecto de vida. Todos estos elementos contribuyen a que la elección de mudanza esté llena de planificación positiva.
Sin embargo, tarde o temprano, estos estados de ánimo también van acompañados de miedos e incertidumbres: adaptarse a una nueva realidad extranjera puede no ser fácil.
Entonces ¿Cómo afrontar las dificultades sin perder de vista la motivación inicial?
Si un viaje de mil millas comienza con un primer paso, Permiteme compartirte el mío.
Intentaré orientarte y contarte mi experiencia de mudarme a la maravillosa isla de Malta, para que solo te quede dar el segundo paso.
Me mudé a Malta hace casi ocho meses, para redescubrirme a mí mismo como persona y profesionalmente, debido a que estos se habían visto opacados por la situación laboral en mi país de origen.
Quería renacer y sentirme como una persona productiva y realizada.
Y aquí estaba en un lugar nuevo, con un idioma y cultura diferente, incluso un sistema de conducción diferente, me sentía perdido pero con un gran deseo de triunfar.
En el proceso de reubicación, siempre se encuentran muchas resistencias y dudas sobre la capacidad de afrontar el cambio, sintiéndose esto confuso y solitario.
¡Pero estos sentimientos no duran para siempre!
Adaptarse a un nuevo país siempre requiere tiempo y confianza en nuestras propias fortalezas. Al principio todo parece difícil, luego la perspectiva cambia.
Después de unos meses, encontré un buen lugar para vivir y un trabajo que amo. Comencé a sentir Malta como mi segundo hogar, un sentimiento de doble pertenencia que nunca antes había experimentado.
La motivación crece si no perdemos de vista el objetivo… mejorar nuestra calidad de vida. Si te encuentras en un proceso de toma de decisiones similar, ¡no te rindas! Sigue perseverando y canaliza tu energía hasta sentirte fortalecido.
Entre el deseo de cambiar y la realidad, hay un camino a seguir, un viaje que es ante todo interior y que debemos afrontar con valentía, conciencia y confianza.
Antes de mudarme a Malta, en mi viaje interior, me encontré con el pasado y le agradecí todas las experiencias que me permitieron crecer, comencé a vivir el presente, imaginé el futuro y entendí quién soy, lo qué quería y carecía. Esa vision es ahora una realidad.
El mío no es solo un testimonio, sino una invitación a la valentía de seguir todos los pasos necesarios para la propia evolución, ¡solo así se puede convertir una vida ordinaria en algo épico!